lunes, junio 16, 2008

CINCO PELÍCULAS SIN RAZÓN NI MOTIVO

Mi querida Tamara me reta a un meme peliculero.
Quizás alberge el morbo de saber lo que un gruñón patológico al que nunca ha gustado una película que haya visto con ella entiende por cine.

Mi querida amiga me gusta el cine que me cuente historias, que me narre algo y me haga pensar, el resto, ya sabes ese de murciélagos fashion y camiones con asteroides me aburre, lo mismo que tanta memez en doble plano que infesta el pobre cine español.

Sin más mis películas favoritas, una mínima selección y que conste que la friki es quizás mi favorita:

1.-Léolo

Es una obra maestra, creo que la he visto mil veces y cada vez me emociona más, no se puede tener más talento en la narración ni mayor brillantez en las imagenes.


2.-Mi hermosa lavandería


Fue un choque de juventud, me abrió todos los sentidos, cada vez que la veo me pinza el recuerdo y me late algo parecido al orgullo. Es prodigiosa, a veces irreal y casi siempre una maravilla.


3.-Solo ellas

Una historia de mujeres que me conmovió, quizás por ese aderezo de los Carpenters, o ese travelling final con la canción de Roy Orbison You get it cantada por Whoopi Golberg y una agonizante Mary Louise Parket que todavía no he consigo ver sin echarme a llorar.


4.-Bagdad Cafe


Es mi definición de cine, una historia, solo eso, dos horas viendo que todo es argumento, todo diálogo, nada artificio. Con ese choque violento de interpretaciones magistrales de dos actrices únicas, CCH Pounder y la musa de Fassbinder, Marianne Sägebrecht. Una obra maestra y la banda sonora inolvidable, con ese Calling you , una de las mejores canciones de la historia del cine.



5.-Sopa de ganso


Mi propuesta friki, y confieso que una de mis películas favoritas, adoro a los Marx, bueno quizás a Groucho un poco (bastante más), me hace reir como nadie, fuera de ese chirriante humor histriónico de Jim Carrey (por dios que alguien que le jubile) o el trazo grueso que hoy tanto se lleva. Groucho era un genio y esta película es su obra maestra. Cuando estoy un poco trite la pongo y siento que hasta respiro mejor después de uno de esos diálogos entre Groucho y Margaret Drumond. Debería ser obligatoria en todas las escuelas de cine.



Espero haber satisfecho tu curiosad querida Tamara, y la próxima vez que me veas refunfuñar al salir del cine de ver 300 o transformers o batman returns o beguins (ya sabes que no están basadas en hechos reales) entiendas mi desazón, que el buen cine requiere talento del que lo hace y casi siempre del que lo ve...